El casino en Viena se encuentra situado en el centro de la ciudad justo al lado de la casa de la ópera. El casino se encuentra en un impresionante edificio de tres plantas de estilo antiguo en la zona peatonal habiendo sido diseñado y amueblado al estilo tradicional vienés con techos altos y paredes estucadas. Aunque a pesar de que poseer un local bonito suele ser un plus en este caso no es suficiente. Soy un fan de los casinos austríacos y ya he visitado otros casinos: Seefeld, Kitzbuhel, Baden. Por lo que lamentablemente debo decir que encontré el casino de Viena el menos excitante de todos.
Admisión en el casino de Viena
Hay dos zonas en el casino de Viena. El casino Jackpot está situado a nivel de calle. Con su norma de traje informal está ideado para atender al público en general. El casino Jackpot abre diariamente a partir de las 11:00 y ofrece más de 100 máquinas tragaperras, una mesa de blackjack, algunas mesas de póquer y una ruleta americana.
El casino Classic ocupa la segunda y la tercera planta. Las mesas de juego y la zona de póquer se sitúan en la segunda planta y las máquinas tragaperras se encuentran en el tercer piso. El casino Classic abre todos los días a partir de las 15:00 y tiene una estricta norma de vestir casi formal.
La entrada a ambos casinos tanto al casino Classic y al casino Jackpot es gratuita y está restringida a mayores de 18 años. Como en otros casinos de Austria se les ofrece a los visitantes la posibilidad de comprar 30 euros en fichas por solo 27 euros. Sin embargo, los jugadores deben apostar todas las fichas al menos una vez antes de que puedan retirar el dinero (para más información, leer mi evaluación del Casino Kitzbuhel).
Fumar en el casino de Viena
Como la mayoría de loas casinos en Austria, el casino de Viena es un casino de fumadores. Hay una pequeña zona para no fumadores en la segunda planta. En realidad es un pequeño lobby rodeado por mamparas de cristal. En el momento de mi visita habían cuatro ruletas en la zona de no fumadores. Tres de ellas estaban funcionando y estaban abarrotadas con jugadores de todas las edades y nacionalidades.
Atmósfera en el casino de Viena
Cuando se entra al casino ascendiendo por la amplia escalinata de mármol en dirección a la recepción de la segunda planta, uno percibe lo exclusivo y elegante que es el ambiente del lugar. De hecho, el casino en Viena está amueblado como una antigua sala de té vienés: alfombras verdes oscuras semejantes al terciopelo, robustos muebles de caoba y un énfasis especial en los pequeños detalles ornamentales. Esparcidos por la segunda planta hay pequeñas zonas con mesas no muy grandes y sofás donde puedes sentarte, tomar una bebida, fumar y relajarte durante un rato. El ambiente de una antigua casa de té no se ve perturbado por el equipamiento electrónico de alta gama como pueden ser los tableros de resultados electrónicos en las mesas de ruleta o los puestos electrónicos independientes de ruleta los cuales están repartidos a lo largo de la sala.
Hay también un restaurante y un bar grande en la segunda planta. En el momento de mi visita el bar esta lleno y había mucho ambiente. Aquí también la muchedumbre era diversa, compuesta por muchas nacionalidades, idiomas y edades.
Juegos clásicos en el casino de Viena
En el momento de mi visita, tres de las cuatro mesas de ruleta en la zona para no fumadores estaban funcionando con un mínimo de dos euros. Los jugadores se peleaban por un lugar cercano a las mesas y pensé que era el momento de abrir la cuarta mesa.
Los juegos de cartas estaban abarrotados igualmente. En total, se abrieron tres mesas de blackjack con un mínimo de 10 euros. Como en los otros casinos austríacos se abrieron una mesa de casino Holdem y una de Caribbean Stud Poker ambas con un ante de 5 euros. Todas las mesas tuvieron una asistencia numerosa.
Póquer en el casino de Viena
Decidí saltar los juegos de mesa y conseguir un poco de experiencia más que necesaria al póquer. Por desgracia, me decepcioné de mala manera. La zona de póquer contaba con 5 mesas. También había un pequeño bar en la zona de póquer, crupieres agradables y una hermosa vista de la zona peatonal. Sin embargo, las 5 mesas se abandonaron. Al igual que sucede en el casino Kitzbuhel parece que el póquer no resulta atractivo a los jugadores en los meses de verano.
Conclusión del casino de Viena
Estaba encantado por la atmósfera exclusiva del casino de Viena. A diferencia del casino Jackpot, el casino Classic se centra en los grandes apostadores. Parte de ello son las elevadas apuestas mínimas. Sin embargo, durante mi visita, estas no parecían ayudar a reducir la muchedumbre. No obstante, el panorama del póquer en el casino me decepcionó.
Resumiendo, habiendo visitado el casino en Baden al día siguiente, debo decirte que si andas mal de tiempo sáltate el casino de Viena y ¡visita el de Baden!